El 24 de agosto se conmemora la liberación de París, un evento significativo en el que jugó un papel crucial la Novena Compañía, compuesta principalmente por republicanos españoles. Entre ellos se destacó Amado Granell Mesado, nacido en Burriana en 1898, quien fue el primero en entrar en el Ayuntamiento de París. Esta es la historia de su valentía y su contribución a uno de los momentos más emblemáticos de la Segunda Guerra Mundial.
Trayectoria Militar de Amado Granell Mesado
Amado Granell Mesado se enlistó en la Legión en 1921, aunque fue licenciado al año siguiente. Sin embargo, su carrera militar no terminó allí. Durante la Guerra Civil Española, se alistó en el Ejército Voluntario, alcanzando el grado de Alférez en el Batallón de Hierro. Este batallón, más tarde transformado en un regimiento motorizado de ametralladoras, jugó un papel crucial en la defensa de Madrid y otras batallas importantes durante la guerra.
Granell en la Segunda Guerra Mundial
Después de la Guerra Civil, Granell continuó su lucha en la Segunda Guerra Mundial, inicialmente en Argelia y más tarde en la famosa Novena Compañía, conocida como “La Nueve”, compuesta mayoritariamente por españoles. Esta compañía fue esencial en la liberación de París el 24 de agosto de 1944, siendo Granell uno de los primeros en llegar al Ayuntamiento de la ciudad. Su unidad, la “La Nueve”, llevaba vehículos con nombres de batallas y lugares españoles, simbolizando su origen y determinación.
Reconocimientos y Legado de Granell
Por sus acciones heroicas, Granell fue condecorado con la Legión de Honor por el general Leclerc y recibió múltiples reconocimientos, incluyendo la Cruz de Guerra. Después de la guerra, eligió vivir en Francia, donde abrió un restaurante y más tarde un comercio en Valencia. Granell falleció en 1972 en un accidente de tráfico, pero su legado como uno de los españoles que liberó París perdura como un símbolo de valentía y compromiso con la libertad.
El Impacto de los Exiliados Españoles en la Historia
Más de medio millón de republicanos españoles se exiliaron tras la Guerra Civil, con muchos de ellos desempeñando roles cruciales en la Segunda Guerra Mundial. Desde luchar en la Legión Extranjera hasta participar activamente en la Resistencia Francesa, los exiliados españoles dejaron una huella indeleble en la historia europea del siglo XX, representando la resistencia contra la tiranía y la lucha por la libertad.